Seamos sinceros, ¡la Semana Santa mola! Seas o no creyente, lo cierto es que es uno de los mejores puentes del año, perfecto para irte de escapada o hacer dulces típicos de estas fechas como, por ejemplo, las torrijas.
¡¡Qué delicia!! Me chiflan… Eso sí, casi mejor no contar las calorías para poder disfrutarlas a gusto. Aunque hoy os propongo una receta un poco más ligera, para comerlas sin remordimientos, porque se hacen al horno, y os aseguro que también están para chuparse los dedos 😉
Ingredientes:
- 1/2 litro de leche.
- Piel de un limón.
- 2 huevos.
- Media barra de pan (si es del día anterior mejor que mejor).
- 2 cucharadas colmadas de azúcar.
- 1 cucharadita de canela (opcional).
* Con estas cantidades, dependiendo del tamaño del pan, os saldrán unas 10-12 torrijas.
Elaboración:
Lo primero que tenemos que hacer es calentar la leche con la piel de un limón, que previamente habremos lavado a conciencia, y dejar que infusione durante media hora, aproximadamente.
Mientras, batimos los huevos y cortamos las rebanadas de pan con un centímetro de grosor.
A continuación, colamos la leche y empapamos las rebanadas de pan hasta que las veamos bien mojadas pero sin que lleguen a romperse.
Después, rebozamos las rebanadas en el huevo y ¡solo nos queda meterlas en el horno! Para eso, lo precalentamos a 200 grados y horneamos las rebanadas en la bandeja, sobre papel vegetal, durante unos 15 minutos (dependiendo de lo doradas que os gusten).
Un truco infalible para que también se doren por la parte de abajo es untar el papel vegetal con un poco de mantequilla, ¡no falla y le da un sabor muy guay! 😉
Finalmente, cuando veamos que están horneadas, las colocamos en un plato y espolvoreamos por encima una mezcla de azúcar y canela (o solo azúcar, como he hecho yo).
Y a vosotros, ¿os gustan las torrijas? ¿Las hacéis en Semana Santa o también a lo largo del año? Os animo a que probéis esta receta de torrijas al horno y me comentéis qué os parece 😉
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