El outfit que os propongo hoy fue uno de los primeros que fotografié cuando comencé con Punto de Lu, ¡hace más de dos años! Sin embargo, por unas cosas u otras quedó en el olvido y estas fotos nunca llegaron a ver la luz, pero… ¡ha llegado el momento!
Todo surgió mientras pensaba en un tutorial de costura que compartiré próximamente, en ese momento recordé este outfit protagonizado por una falda fruncida cuya mezcla de colores en el estampado me chifla y, como todavía no habíais visto las fotografías, decidí que era hora de compartirlas.
Ya veis que mi hermana era más niña y las imágenes quizá más amateurs, pero el look me sigue pareciendo ideal de cara a la primavera, pues está compuesto por básicos que no pasan de moda y tan pronto como suban las temperaturas volveremos a lucir piernas 😉
Una falda fruncida es, tal vez, uno de los modelos más sencillos, sin embargo, siempre se le puede dar un toque especial. En este caso, elegí una tela con algo de cuerpo para que tuviese más volumen y es que, aunque hay quien prefiere tejidos más ligeros para favorecer la silueta, a mí me gusta que armen, que tengan muuucho volumen, que sean femeninos y con un punto naif.
En cuanto al diseño, lo que más destaca es su cintura ancha, concretamente de 7 centímetros, que no es muy común en este tipo de prendas, mas favorece un montón y resalta la figura. Por lo demás, se cierra en el lateral con cremallera invisible y tiene una bastilla ancha cosida a máquina. Esta vez opté por no forrarla, ya que la tela no transparenta ni cede y al tener vuelo tampoco se deforma.
El resto del look, formado por básicos como una camiseta blanca y una cazadora vaquera es de lo más casual, pero es que con un estampado tan bonito y colorido no necesita más, ¿no creéis?
Espero que os gusten las fotos y el outfit, yo ya estoy deseando que comience el buen tiempo para volver a lucirla 🙂
Cazadora: Stradivarius
Camiseta: Zara
Falda: Punto de Lu
Zapatillas: Converse
Quizás te interese…
Dejar un comentario